Microrrelatos de MrQ, 8 - ASÍ FUE LA HISTORIA -

Ahora sí, mira que me cuesta... pero déjame a mí, Amo. Ahora sí, ¡ahora si que lo cuento!!!

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Meses después el Amo escribe el:

Microrrelato, ASÍ FUE LA HISTORIA

  

Todo fue en una noche de insomnio y trabajo atrasado, como cosa rara me levanté, encendí el ordenador y me puse a trabajar, cosa que no hago nunca fuera de horas y menos por la noche. Al mirar el correo, había una carta que me pareció especial.

En la sección de contactos del CS le había dejado un mensaje a una sumisa mayor que yo porque me gustó lo que ponía en su perfil. Ella me contestó muy cortésmente que no buscaba nada y que sólo había entrado a borrar su perfil, le contesté agradeciéndole la carta, y al momento contestó que para nada. Bueno, de una cosa a otra y acabamos en el messenger.

Empezamos a hablar y estuvimos hasta muy tarde, casi demasiado tarde. Quedamos al día siguiente en un centro comercial, por aquello de quedar en un sitio público para la primera cita. - ¿Que ropa llevarás tú?- la que llevaré yo. Sólo quedamos para hablar contando que no pasaría de allí... Y a la hora acordada entró una mujer a la cafetería del centro comercial mirando con cara de perdida. Nada de nervios, porque pensábamos que no saldría nada de allí. Después de dar paseos alrededor del centro y hablar de todo empezaron los nervios, las dudas de si la persona que tenias delante era ella la persona que has buscado durante años.

Bajamos al parking y nos despedimos, después de darnos los teléfonos y dejar casi decidido que probaríamos. De allí salieron las llamadas telefónicas, messenger y alguna quedada más para hablar cara a cara. Al final el tiempo nos ha dado la razón, la corazonada fue buena.

De allí salió la primera sesión. Fue bien o muy bien para ser la primera y a esta le siguió la segunda, la tercera y en estos momentos por suerte ya no llevo la cuenta de las sesiones, ya son muchas pero nunca suficientes.
Después de las suficientes sesiones como para perder la cuenta de las que hemos tenido y mucha confianza ganada, muchos cafés y alguna comida, las cosas van de maravilla y sé que ella es mucho más de lo que cree y que no sabe dónde esta su límite.

Lo mejor es que aún no sé todo lo que sacará de mí, porque ella saca de mí lo que no sabía que tenía, además me ha enseñado en poco tiempo muchas cosas -entre ellas la auténtica entrega- y hace que desee verla y tenerla cada minuto.

Hay que ver, es verdad que en el Corte Inglés se encuentra lo mejor, yo lo encontré.

MrQ