Espada.

Espada. El tiempo.
Quietud y movimiento.
Deseo y espera.
Poder y voluntad. Voluntad y poder.

Siempre había creído que esta era la definición de la vida, pero estaba equivocada. Ahora se que esa es la definición de mi vida. De mi nueva vida.

Adoro sus manos.

Adoro a Mi Dueño.

Le adoro porque me ha dado y me da, cada día y a cada momento, más de lo que es posible.

Le adoro al completo: su inteligencia, su carácter, su alegría, y su buen humor, sus sesiones, su complicidad, su saber estar.

Adoro cada parte de su ser:
- Adoro sus manos... Esas manos que igual que acarician, castigan, esas manos que palmotean, que recorren mi piel, que se estrellan contra cada parte de mi cuerpo cuando, dónde y como ÉL quiere.
- Adoro su boca que igual que ordena y castiga, premia.
- Adoro su ¿virilidad? su ¿masculinidad? pues eso también, sin duda, pero llamando a las cosas por su nombre soy la ferviente adoradora de la polla de Mi Amo, que castiga y premia, que castigue como castigue siempre premia.

Adoro cada parte de su ser.
Le adoro porque aunque haya tenido un día horrible, o un cúmulo de problemas, siempre está para mi. Le adoro porque siempre consigue que las sesiones sean diferentes, porque hasta cuando está cansado no renuncia a ellas.

Le adoro porque transforma cada momento y cada situación en algo maravilloso y digno de recordar
Adoro a Mi Dueño, no podria ser de otra manera.
Sí, le adoro al completo, le adoro porque me ha dado y me da, cada día y a cada momento, más de lo que es posible.

Nota: Imagen de Escher

Fantasías

¿Qué ha pasado con mis fantasías? Yo que tenía imaginación para dar y vender, que tenía para escribir libros, que no me las acababa. ¿Qué ha pasado con ellas? ¿Dónde están?

Se han ido, se han evaporado, se han diluido como lágrimas en la lluvia, ya no las tengo porque Él, el Señor Cuadrador de Círculos,
Mi Dueño, las ha cumplido todas y algunas sin saberlo, estoy segura. Ya no son fantasías, son realidades, Mi Dueño las ha matado para regalarme felicidad.

A partir de aquí, todo está por hacer y escribir.
Siento que el futuro es nuestro.
Te adoro, Mi Señor, Mi Dueño.

Imagen, Burbujas de colores de Ileana777_photo

- X - En cruz. Sin vuelta atrás - X -

Una sesión muy especial por varios motivos. Estrenábamos sitio y aunque estaba casi convencida de que le gustaría, existía el riesgo de que se cayera de espaldas al verlo... pero no, le gustó. Ya lo siento como nuestra mazmorra particular.

¿Qué pasó en esa sesión, que la hizo tan especial? Le serví lo mejor que supe y pude, le obedecí, le complací, disfrutamos, nos reímos... pero eso lo hacemos siempre, de una manera u otra siempre es así, eso nunca falta.

Sólo se que por sorprenderle, porque se como le gusta, por inaugurar esta nueva etapa, empecé saltándome mis prejuicios y me presenté ante ÉL vestida de calle pero a su gusto. Eso fue el principio, porque la sesión fue monotemática: límites por los aires, placer versus límites.

Me cegó, por poco tiempo, pero esa sensación de ser guiada por Él, de estar completamente indefensa y en sus manos, me hizo sentir que estaba en las mejores manos y una expectación tremenda por saber lo que me esperaba.
Me ató, no era la primera vez, pero sí la primera en cruz... y esa primera vez como todas las importantes se te quedan gravadas para los restos.
Nos bebimos el tiempo, porque tiempo había. El tiempo fue nuestro aliado, porque nos dio la tranquilidad suficiente para que MrQ marcara los ritmos a su gusto, para disfrutar sin prisas, para sentir y vivir esa transformación ese especie de puente iniciático: cuando entramos Él era Mi Amo y yo ya era y me sentía muy suya, pero cuando salimos, los dos eramos otra cosa. Allí vivimos la seguridad y la certeza.Ya la teníamos, pero salimos con algo mucho más fuerte, más profundo.

Esa sesión fue especial porque aprendí que siendo ya suya, que perteneciéndole en cuerpo y alma todavía se puede sentir más, se puede disfrutar más, vivirlo más profundamente... no se donde está el límite, no se hasta donde llegará mi Cuadrador de Círculos, Mi AMO y ahora se que mi DUEÑO pero sí se que me tendrá a su lado.

Microrrelatos de MrQ, 13 - Cruz-

- CRUZ -

Entré, ella aún no había llegado. Arreglé unas tonterías que tenia pendientes y me asomé al amplio ventanal para ver como llegaba con ese caminar que me encanta.
Al final decidí salir a buscar unas cosas que me olvide en el coche, cuando regresé a la mazmorra ya estaba ella.
Me saludo con alegría, iba vestida de manera especial para la ocasión, me encantó, completamente a mi gusto y eso se que le cuesta.
Empezamos a hablar y a mirar las cosas pendientes de hacer y de buscar, ella simplemente me escuchaba y asentía con la cabeza sin dejar de hacer las tareas que le había asignado.
Después entre en la sala que se nos habían asignado para usar de mazmorra, para mi no era la mas adecuada pero en ese momento no se podía escoger otra cosa, a la fuerza ahorcan y asignan salas.

Tuvimos una sesión como todas las sesiones que habíamos tenido quizás con mas fortuna porque hiciéramos lo que hiciéramos salía bien y lo disfrutábamos: felaciones, penetraciones, caricias, todo lo que permitían nuestros cuerpos, azotes, fustas y un artilugio comprado en los chinos con pinzas en las puntas que tiene su punto.

Mientras ella estaba encima, mirando a un rincón de la habitación vi que había algo parecido a una cruz de San Andrés, ella siempre había querido ser inmovilizada y azotada en una.
Le ordené que saliera de la sala después de ponerse algo de ropa encima para no ser vista por fisgones inoportunos. Ella abandonó la sala mientras con 4 cuerdas preparé la cruz que tanto ansiaba.

Cogí la cola de gato y empecé a azotarla sin motivo, sólo porque me apetecía. Ella gemía pero pedía más, cogí la fusta y empecé a azotar la parte interior de los muslos de uno a otro como estuviera tocando el triángulo para llamar a comer a los leñadores de la montaña, pero aquí lo que se oía eran sus gemidos pidiendo más. Me levanté, cogí la cola de gato y la azoté todo lo fuerte que pude, ella se retorcía atada en la cruz.
La besé y acaricié las partes doloridas. La desaté y le ordené vestirse sin tocarme, eso fue lo que mas le costó. Abandonamos la sala y nos fuimos a hacer el café de rigor y comentar la jugada.

Ella se sentía feliz y yo también.
Fue diferente, fue tranquila y fue una sesión más a retener en la memoria.

Fin.
MrQ

Domingo por la mañana.

- Como cada domingo, pongo el despertador a las 8, ni muy temprano ni muy tarde. Me gusta hacerme la remolona y dejar que vaya sonando cada 10m. Me gusta apagarlo y entrar en ese duerme vela donde los sueños se liberan y los deseos, ocultos salen a pasear.

- Me pasa siempre, de lunes a domingo, pero la ventaja de estos últimos es que puedes retrasar, lentamente, cada 10m, el momento de volver a la realidad. La ventaja es que puedes recrearte en la visión de tu AMO y la última vez, hace apenas unas horas, en que estuvimos juntos.

- Mi AMO, ayer me diste una sorpresa totalmente inesperada. Se que las sorpresas, por definición son inesperadas, pero ni esperaba verte ni mucho menos tener sesión a esas horas de la madrugada.

- Realmente placentera. Estoy a punto de irme y de repente, ese ruido y esa ventana que anuncian tu llegada.

- De repente apareces con no muy buen aspecto, se te ve cansado y la tos sigue sin abandonarte... ay, ay, hay, hay...ahí, ahí me quieres ver y aquí estoy, siempre para ti, siempre a tu servicio Mi Amo.

Ítaca. Nuestro camino juntos.

No quiero llegar a Ítaca, no quiero que lleguemos, quiero disfrutar del viaje, quiero que nos dure eternamente..... y si llegamos, que lleguemos, en la largura del tiempo, juntos.

ÍTACA

Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios.

Ten siempre a Itaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguantar a que Itaca te enriquezca.

Itaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Itaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Itacas.

C. P. Cavafis. Antología poética.
Alianza Editorial, Madrid 1999.

Edición y traducción, Pedro Bádenas de la Peña

En el bosque y de noche. Llantos de pasión.

Un encuentro para un café. ¿Un paseo? Pues un paseo para la sumi. ¿Ciudad, campo? Campo, por supuesto.
Un bosque cercano. El anochecer, un Amo con su embelesada esclava y nada más.
Llega la noche y nos da su impunidad, nos libera de convencionalismos, nos deja libertad para comportamos como lo que somos, un Amo con su esclava... y el paseo se transforma en sesión reglada. Sin artilugios, sin el sumi-kit, sólo con la imaginación del Amo, una esclava entregada y alrededor mudos e impasibles, árboles, musgo, zarzas, y ramas que se convierten en grilletes o en varas.
¿Como es posible que con tan poco se pueda disfrutar tanto?
Es posible porque le adoro, porque me tiene embrujada, me tiene cautiva, porque soy su esclava.

Amo, Mi Amo, soy tuya.
Amo sorpréndeme, Amo úsame, soy tuya. Amo vuelve a enseñarme cómo se pasa del dolor al placer.
Amo vuelve a entrar en mí. Entra por, donde y cuando quieras, de día o de noche, a cubierto o al sereno pero... ven, úsame, entra porque... soy tuya.

MICRORRELATOS DE MRQ , 12 - BOSQUE-

- BOSQUE -

Su Amo la recogió donde siempre, pero eso sí, por sorpresa. Ella se sorprendió feliz al verlo:
- ¿Quiere un café?- preguntó contenta.
-  Sí, claro que quiero un café y luego damos un paseo.

Después de tomar un café calentito cogieron el coche y fueron hacia la montaña, ya estaba oscureciendo. Bajaron del coche y pasearon un rato. Cuando estaban en un rincón oscuro ella se paró y sonrió picarona.

- Amo, ¿no quiere nada de mi???

Al amo la besó y empezó a acariciar su cuerpo. Sin quitarse la falda ella se bajó las bragas y con una destreza asombrosa se deshizo el sujetador sin quitarse la camisa, después abrió un poco mas su escote.
Estaba vestida para los demás, por si pasaba alguien, y desnuda para el uso de su Amo.

Él Amo metió la mano bajo su falda y empezó a masturbarla, ella sollozaba y se retorcía.
Cuando se corrió Él tenía la mano humedecida y empezó a lubricarle el culo con su propio flujo. Sacó su polla y le pidió que se la humedeciera. Cuando ella se la metió en la boca y la humedeció Él la levantó de golpe, la giró, le levantó la falda y le metió la polla por el culo. Ella dio un gritito casi cómico al sentirla, Él empezó a moverse suavemente. Los dos lo disfrutaban y Él se corrió dentro de ella intentando no gritar.

Cuando acabó y ya se vestían para irse, ella con una ingenua sonrisa le dijo, - Mi Amo, sin la fusta no es lo mismo pero como no ha traído nada... ¡pues se fastidia!

Él la hizo detenerse y apoyar las manos en un árbol, le levantó la falda y después de acariciarlo suavemente le pidió a ella que eligiera un numero del 5 al 10. Ella dijo el 8, sabia que 8 azotes con la mano los aguantaría sin problemas, pero no se dio cuenta que mientras ella pensaba en el número su Amo había cortado una rama fina del árbol.

Con la vara en la mano y mirándola le dio el primer golpe, ella no se lo esperaba y dio un grito que podría haber despertado a media montaña.
-Vamos, sólo te quedan siete- le espetó el Amo con media sonrisa.
Nunca había probado una vara. Ella contó los azotes y los agradeció uno a uno.

Ahora ya sabía lo que se sentía. Su culo estaba dolorido, su Amo feliz y ella... bueno, ya nos lo contará cuando pueda volver a sentarse.

MrQ